Si estás intentando descargar un capítulo de Juego de Tronos mientras navegas por Internet, y en otra habitación disfrutan de una partida online, y no eres capaz de conseguir un nivel de señal WiFi adecuado, no te apresures a pensar que todos los males provienen del router que tienes. Tampoco tienes que ir al día siguiente a comprar uno nuevo. Lo más probable es que un extensor de red wifi pueda solucionar los problemas que tienes.
Como su nombre indica, los extensores de red recogen la señal WiFi del router, la amplifican y la retransmiten con mayor potencia al resto de compartimentos más alejados del router WiFi. Son bastante fáciles de instalar, y muchos modelos vienen en varias formas, tamaños y con diferentes velocidades, pero también tienen sus limitaciones. Normalmente son la mitad de rápidos que un router WiFi y crean una red extendida separada que dificulta la itinerancia sin interrupciones.
Dependiendo del tamaño y la distribución de tu casa, un router de gama media o alta puede proporcionar toda la cobertura WiFi que necesitas, pero para viviendas construidas con materiales densos como ladrillo, o paredes antiguas de gran grosor, yeso y metales, la señal se degradará muy rápidamente y sentirás como te quedas sin conexión a las primeras de cambio, desde muchos de los compartimentos del hogar.
Del mismo modo, los hogares con varios pisos y muchas paredes son más susceptibles a la pérdida de señal que una casa de un único piso. En algunos casos, podrás recolocar el router en una ubicación más central, para que pueda entregar una señal más fuerte a aquellas áreas que antes estaban fuera de su alcance (zonas muertas).
En la mayoría de los hogares, sin embargo, la localización del dispositivo está atada a la habitación donde entra el cable de conexión a Internet (desde que la fibra óptica llegó a los hogares, mucho más ya que viene por las paredes exteriores de los edificios), que significa que el reubicar el router requerirá probablemente trasladar el cable Ethernet al área deseada. Los extensores de red proporcionan pues una forma relativamente fácil de mejorar la cobertura WiFi sin tener que tirar cables por casa.
¿Cómo puedo encontrar el extensor de red wifi adecuado para mi router?
Al elegir un extensor de red es importante escoger uno que coincida con las especificaciones del router que poseamos (o vayamos a comprar también). Muchos de ellos son relativamente baratos, pero tienes que tener muy en cuenta los aspectos comentados anteriormente. De nada sirve contratar una conexión de Internet a 300 Mbps si luego usas un extensor de señal de 150 Mbps. Esa será la máxima velocidad que conseguirás.
Por ejemplo, si tienes un router de doble banda AC1900, busca un extensor de doble banda AC1900 (o mejor). Si tu router admite múltiples flujos de datos de salida y entrada (MU-MIMO), que proporciona un rendimiento mejorado enviando datos a los clientes simultáneamente en vez de secuencialmente, busca un extensor que soporte esta tecnología.
O si tienes un router WiFi 802.11ac entonces utiliza dos bandas diferentes, la de 5 GHz (más rápida) y la de 2.4 Ghz, para ciertos dispositivos antiguos o cuando la de 5 Ghz está saturada o no tiene alcance. Con un router de este tipo debes asegurarte de que el amplificador de señal WiFi también soporta doble banda. Si sólo usa la de 2.4 GHz entonces no aprovecharás la velocidad de tu router.
También debes fijarte si incorpora un conector Ethernet, por si quieres conectar ahí un ordenador o una consola por cable, en lugar de por WiFi.
¿Cómo es la puesta en marcha de un extensor de red wifi?
No hace mucho tiempo, la configuración de un extensor de red requería de un poco de experiencia técnica y una buena dosis de paciencia, para encontrar la mejor ubicación (idealmente a medio camino entre el router y la zona muerta).
Pero la mayoría de los routers de hoy en día y extensores de red incorporan la tecnología WPS (WiFi Protected Setup), que hace que el emparejamiento de los dos dispositivos sea tan simple como presionar un par de botones, dar nombre a la nueva red extendida y crear una contraseña de red.
Además, casi todos los fabricantes ofrecen asistentes de configuración basados en entornos web e instrucciones precisas que ayudan a configurarlos. Algunos extensores (pero no todos) están equipados con indicadores LED de estado ,que indican si el extensor está demasiado lejos del router. Los extensores también pueden ofrecer características avanzadas como las que poseen los routers: redes de invitados, programación de acceso y capacidades de servidor de medios.
En algunos casos, especialmente si se configura como punto de acceso, tienes que conectarlo a un PC y usar un software de configuración para introducir manualmente el nombre y la contraseña de tu WiFi.
Ubicación del extensor de red wifi, la clave
Como hemos comentado, la ubicación del dispositivo es muy importante. Lo ideal es situarlo a medio camino entre el router y el lugar al que quieres que llegue la señal.
Pero el amplificador WiFi debe recibir bien la señal del router, porque sino aunque la amplifique mucho, no recibirá bien los datos y la velocidad será baja. Así que no lo alejes demasiado.
En chalets de dos pisos o locales grandes, puede ser necesario colocar dos o más extensores de señal. Depende de su alcance, número de antenas y calidad.
Principales limitaciones de los extensores de red wifi
Aunque son bastante fáciles de configurar, los extensores de red tienen también sus limitaciones. Estos dispositivos usan un SSID de red separado que tiene que iniciar sesión a medida que te mueven por la casa, y las velocidades del WiFi suelen ser la mitad de lo que se puede obtener del router principal.
La mayoría de los extensores de banda dual utilizan ambas bandas de radio, para transmitir datos desde y hacia el router, lo que significa que los dispositivos que se conectan al extensor están compitiendo por el ancho de banda con el router.
Para ayudar a aliviar la congestión de la red, algunos fabricantes le permiten dedicar una banda para las comunicaciones entre el router y el extensor de red.