El mundo digital gira en torno a las direcciones IP. Cada dispositivo necesita una IP para comunicarse en Internet o en una red privada. Dado que no hay suficientes direcciones IP públicas para cada dispositivo conectado a Internet (al menos con IPv4, ya que con IPv6 se soluciona el problema), la “cosa” llamada NAT (Network Address Translation) se vuelve extremadamente importante. Significa “Traducción de Direcciones de Red” y es una función proporcionada por los routers para permitir que varios dispositivos accedan a Internet a través de una única dirección IP pública.