¿Quieres tener conexión a Internet en exteriores?¿Estás pensando en cómo extender la red WiFi existente hasta otro punto fuera de la casa? En la mayoría de las ocasiones en las que tenemos una baja velocidad de conexión a través de WiFi, un punto de acceso inalámbrico para exteriores puede ser la respuesta a todos nuestros problemas. A menos que tengas un router antiguo, probablemente estés experimentando problemas en la conectividad debidos a la frecuencia que estás utilizando para transmitir la señal del WiFi. La mayoría de los routers transmiten en la banda de los 2,4 Ghz (hay otros que también lo hacen en la de los 5 GHz), la cual se trata de una frecuencia muy concurrida.
Considera la siguiente situación: todas las casas de tu alrededor, probablemente, se conecten a Internet a través de un router WiFi. Entonces, considera probable que cada uno de estos routers estarán utilizando la banda de los 2,4 GHz. Muchos otros dispositivos inalámbricos también utilizan esa misma frecuencia, tales como las llaves para la apertura de las puertas de garajes, los dispositivos que monitorizan a los bebés, las transistores de mano, los smartphones, y muchos más. Lo que tenemos pues, es una frecuencia congestionada que proporcionará velocidades y tasas de transferencia de datos bajas.