Anunciado en septiembre, el Samsung Gear S es el sexto intento de la empresa de electrónica de Corea del Sur para hacer un smartwatch. Tiene las características de un teléfono de gama media de hace unos años e incorpora Tizen, el sistema operativo propietario de Samsung.
El principal atractivo del dispositivo radica en que puede ser utilizado de forma independiente al resto de los dispositivos. Junto con el bluetooth, el reloj más novedoso de Samsung también incorpora Wi-Fi, así como la conectividad 2G y 3G.